Un año después de la bomba atómica de Hiroshima, a un quilómetro del epicentro de la explosión, un viejo Ginkgo destruído, empezó a brotar, convirtiéndose desde entonces, en un símbolo del renacimiento en Japón.

También te puede interesar
VEREDICTO DE MESOTHERAPIST DE FILORGA: PROMESAS CUMPLIDAS
T-CUIDA DREN. DRENA Y ELIMINA TOXINAS

No te pierdas ni una publicación

Suscríbete a La Cremola y recibe todas las novedades por email.