MAGNESIO, EL ELEMENTO ESENCIAL DEL ORGANISMO

El magnesio es un elemento químico esencial para el ser humano. Es el quinto mineral, por su abundancia, en el organismo. De hecho, es necesario para más de 300 reacciones bioquímicas en el cuerpo. La mayor parte del magnesio se encuentra en los huesos, un 60%; un 28% en órganos y músculos, y un 2% en los líquidos corporales. Es la base de un sistema inmunitario sano, ya que participa en la transmisión de los impulsos nerviosos, en la contracción y relajación de los músculos, y en el metabolismo energético.

He aquí sus principales funciones en el organismo:

-Es necesario para el metabolsimo del calcio, fósforo, sodio, potasio y vitamina C. Por ello, la combinación de magnesio con estos componentes potencia su acción.

– Regula el ritmo cardiaco.

– Regula los niveles de azúcar en sangre.

–  Favorece la relajación y el sueño, al actuar sobre el sistema neurológico.

– Participa en la producción de energía. Digamos que actúa como energizante y calmante en el organismo. Aunque suene paradójico, se necesita energía para relajarse.

– Participa en el mantenimiento de células y tejidos.

– Ayuda a distribuir los minerales a través de las membranas celulares.

– Combate el estrés.

– Combate el estreñimiento, al mejorar la función intestinal.

– Neutraliza los ácidos del estómago.

La cantidad diaria recomendada de magnesio es de 300 a 350 mg, dependiendo de la altura y el peso del individuo, no debiendo superar, en ningún caso, los 500 mg al día. Este mineral se encuentra en muchos alimentos, como los frutos secos – sésamo, girasol, almendras, avellanas, nueces, pistachos – legumbres – soja, garbanzos, alubias y lentejas – cereales – trigo, levadura, arroz y mijo – y verduras de hoja verde.

Su carencia puede provocar debilidad muscular, calambres, depósitos de calcio, insomnio, falta de concentración, fatiga o apatía. Esta deficiencia puede darse en personas alcohólicas, casos de alteración del metabolsimo, problemas de absorción, dietas muy pobres de forma continuada, abuso de productos diuréticos…

CLORURO DE MAGNESIO, CARBONATO DE MAGNESIO…

Las sales de magnesio más comúnmente aconsejadas son el cloruro de magnesio, el carbonato de magnesio y el sulfato de magnesio.

El cloruro de magnesio, una sal de sabor amargo, tiene propiedades laxantes, siendo muy recomendado para combatir el estreñimiento.              El carbonato de magnesio es ideal para tratar problemas de acidez. De hecho, vino a sustituir al bicarbonato de sodio, tan recetado antiguamente para evitar este molesto problema. Y es que el carbonato de magnesio neutraliza la acidez sin los inconvenientes del bicarbonato de sodio, que quitaba el malestar de momento, pero que, a largo plazo, provocaba un efecto rebote, aumentando el problema.

En cuanto a contraindicaciones a la hora de tomar suplementos a base de magnesio, las personas con problemas renales o cardiacos deben consultar con el médico antes de tomarlos. Lo mismo ocurre si se está tomando antibiótico, ya que podría disminuir su eficacia.

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